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6 Tips para ser menos dependientes del azúcar

Es cierto que comerse un postre o un helado es una experiencia muy agradable para nuestro paladar, incluso podemos llegarnos a sentir felices después de disfrutar de un delicioso chocolate suizo, te has preguntado, ¿por qué sucede esto?

Cuando comemos azúcar nuestro cerebro segrega una sustancia llamada serotonina y esto ocurre exactamente desde el principal responsable de nuestras emociones: el hipotálamo. Dicho neurotransmisor (serotonina) se produce en momentos de felicidad o placer y aquí viene la parte mas interesante, después de este estado de euforia y deleite el cerebro te invita a que le sigas dando más azúcar (por eso no es lo mismo comerse una tableta de chocolate con leche, que una tableta con 85% de contenido de cacao) haz la prueba, te darás cuenta que el alto contenido de azúcar añadido de una chocolatina corriente, te invitará a que sigas comiendo mas y mas, en cambio si comes una tableta de chocolate oscuro con menor contenido de azúcar añadido, tu cerebro te dirá que es suficiente y seguramente dejarás de comer luego de la primera o segunda tableta.

La alteración hormonal que se presenta cuando comemos constantemente azúcar, nos lleva a vivir en un círculo vicioso, la principal consecuencia es la brusca elevación de una de las hormonas reguladoras de los niveles de azúcar en sangre, también conocida como la hormona del almacenamiento, la insulina. Si tenemos constantemente altos picos de insulina a causa de comer alimentos muy ricos en azúcares simples (no tiene que saber dulce para que sea azúcar para el cerebro y la harina de trigo es un ejemplo de ello), el cerebro no dejará de reclamar esa sensación que le genera placer, el inconveniente está cuando esto se vuelve repetitivo y las consecuencias a nivel de salud comienzan a aparecer: sobrepeso, diabetes, resistencia a la insulina, síndrome metabólico, enfermedades cardiovasculares, entre otras.

Conociendo los efectos que tiene el exceso de azúcar simple en nuestro organismo, les doy estos 6 tips que nos servirán para moderarla en nuestra alimentación diaria:

1. LEER LA INFORMACIÓN NUTRICIONAL: prestar especial atención a los ingredientes, si en el empaque encontramos palabras como: azúcar, panela, azúcar morena, syrup, dextrosa, dextrina, melasa, jarabe de maíz, jarabe de glucosa, jarabe de malta, miel, syrup de maíz, fructosa, maltosa, jugo de caña, néctar de agave, sucralosa, d-ribosa, galactosa, jugo de fruta, jugo de caña evaporado, sólidos de jarabe de maíz, jarabe de arce, malta diastática, etc.), esto ya nos indica que el alimento tiene azúcares añadidos, por lo tanto tendrá un mayor impacto sobre nuestros niveles de glucosa en sangre y posteriormente, sobre nuestro antojo de comer mas y mas carbohidratos. Preferible escoger aquellos alimentos como las frutas, vegetales y lácteos, que si bien contienen azúcar, son de origen propio y totalmente natural, por lo tanto estas fuentes de carbohidratos, serán absorbidas de forma mas lenta.

2. BALANCEAR NUESTRO PLATO: combinar las fuentes de carbohidrato de mayor carga glucémica (papa, pasta, pan, yuca, plátano, etc.) con alimentos que nos ayuden a regular la entrada rápida de glucosa al torrente sanguíneo, para eso recomiendo acompañar dicho carbohidrato, con una porción de proteína magra como el pescado, pollo, huevo, carne con bajo contenido graso o queso fresco, una pequeña porción de grasas insaturadas como el aceite de oliva extra virgen, nueces, aceitunas, semillas o aguacate y alimentos altos en fibra y nutrientes como los son los vegetales y frutas. Todos ellos juntos (en las porciones ajustadas a cada persona), no solo son buenos aliados para armar platos muy nutritivos y balanceados, sino que también nos proporcionarán una sensación de saciedad mas prolongada y menos antojos por comer dulces.

3. AÑADIR UN TOQUE SPICY: puedes darle a tus comidas un toque de sabor extra cuando añadimos especias que ayudan a resaltar los sabores, por ejemplo: canela, vainilla, jengibre, pimienta cayena, curry, etc.

4. PRESTAR ATENCIÓN A LAS BEBIDAS: entre un 40 y 50% de los azúcares añadidos se encuentran en las bebidas tipo gaseosa, té helado embotellado, jugos de caja, bebidas energizantes y yogures de sabores (punto especial para tener en cuenta para los niños), revisar que la porción entera no exceda el 5% del valor diario estipulado (esto equivale a máximo 6 cditas. de azúcar añadido al día, por lo regular un jugo de caja de “fruta” tiene esta cantidad o mas).

5. CONOCER NUESTROS ANTOJOS: podemos preparar nuestras propias versiones mas saludables y nutritivas en casa y de paso invitamos a los niños a que participen, interactúen con los alimentos y se diviertan un rato.

6. COMENZAR DESPACIO: para algunas personas el azúcar es realmente una adicción, así que cortarla de raíz puede que no sea la solución de entrada, darse tiempo y poner metas alcanzables semanales puede ser una medida mas sostenible, por ejemplo, si eres de las personas que no puede vivir sin la coca cola, comienza recortando la cantidad que usualmente tomas, ponte metas semanales y tu cerebro se volverá cada vez menos dependiente de ella.

Por último, comerse un helado, una chocolatina o un postre de manera ocasional no es lo que va a enfermarnos o hacernos subir de peso, lo mas importante es aprender a conectarnos con nuestro cuerpo y entender cuáles son sus necesidades reales para luego darle lo mejor, este proceso de conexión y consciencia es lo finalmente nos permitirá vivir en un balance real y sostenido.

Por:
Diana De la Ossa G. IRF Practitioner
Programa NutriVita Tel. 314-5967758
www.nutrivitabq.com

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